El precio del poder

Mays, Aaron y Bonds

Hace unos días me dio agrado que  los Twins de Minnesota ascendieran de nuevo al equipo grande al venezolano Oswaldo Arcia. Contando apenas con 22 años, despunta como el LF de los Mellizos para el futuro, este pelotero cuenta en sus herramientas con una buena dosis de poder llevando 12 cuadrangulares hasta el 14 de septiembre, sin embargo, su misión encomendada por los técnicos de esa organización es que debe trabajar seriamente con su contacto, ya que en 315 turnos legales ha sido ponchado 103 veces, lo cual haciendo una proyección de una temporada completa con al menos de 550 turnos podría alcanzar fácilmente la friolera de más de 170 ponches por temporada.

Esta situación me hace recordar uno de los consejos que Reggie Jackson Martinez le dio al venezolano Antonio Armas en los 80s’ indicándole que no importa cuántas veces te ponches, mas importante son las veces que la desapareces del estadio, y ciertamente Armas fue líder en cuadrangulares en el año 1981 (22, temporada acortada por la huelga) y en 1984 (43) jugando con Oakland y Boston respectivamente, pero ojo, lidero el renglón de ponches también en esos años con 115 y 156.

Comencé a revisar un poco las estadísticas de los bateadores notables de poder de las grandes ligas, con la tesis de que los mismos tuvieran un número elevado de strikeouts  y me he llevado algunas sorpresas:

	Numero de Temporadas	HR de por vida	Ponches de por vida	Promedio de Ponches por temporada
Barry Bonds	22	762	1539	83
Hank Aaron	23	755	1383	68
Babe Ruth	22	714	1330	86
Willie Mays	22	660	1526	83

El sultan del swing: Babe Ruth

Pues sí, ninguno de los cuatro primeros jonroneros de todos los tiempos promediaron en sus carreras más de 100 ponches por temporada, además, todos excelsos bateadores de .300 de average (a excepción de Bonds .298) lo que los hacia ver como los más peligrosos en la caja de los bateo.

Y no es casualidad, ni ningún secreto para nadie que los dos mejores bateadores de los últimos 10 años sean el dominicano Alberto Pujols y Miguel Cabrera, por lo que seguí mi búsqueda de numeritos de los activos y miren esto:

	Numero de Temporadas	HR de por vida	Ponches de por vida	Promedio de Ponches por temporada
Albert Pujols	13	492	835	64
Miguel Cabrera	11	359	1181	108

Manteniendo Pujols la tendencia y con Cabrera que pareciera fuera de este lote, sin embargo un detalle para analizar es que Miguel en las últimas tres temporadas no ha superado los 100 ponches, por lo que a mi juicio poco a poco se hará merecedor de entrar de esa elite por lo corta de su carrera aun y por su evolución como bateador para disminuir esta cifra ano a ano, además tiene la posibilidad real de ser el primer derecho en más de un siglo en ganar en forma consecutiva por tres años títulos de bateo y cuidado si nuevamente  la triple corona (algo sin precedentes en los anales de MLB) si la salud y Chris Davis (Orioles) se lo permiten.

No cabe duda que el cuadrangular siempre será el batazo que nos dejara asombrados y timbrados de emoción, sin embargo, el precio a pagar en la mayoría de los casos para peloteros por debajo de la categoría de los arriba mencionados será el ser retirado por la vía del ponche.

El campeón del pundonor: Miguel Cabrera

En esta época en la cual he visto menos pelota en mi vida por el nacimiento de mi hijo Eduardo, situación que disfruto plenamente y no cambiaría por nada en el mundo, hace que cada ratito que me siento a ver televisión para ver un juego de beisbol sea un momento más apreciado que en mi pasado reciente y más aún cuando ocurre situaciones como la que aconteció el viernes pasado en el encuentro entre Yankees de New York y Tigres de Detroit.

Les cuento que solo vi tres innings de mencionado juego y para ese entonces los Tigres se encontraban abajo por dos carreras (3-1) y mi mente venezolanista y cabalística me hizo sacar la cuenta de cuantos bateadores deberían pasar para que le pudiere tocar otro turno al bate a Miguel Cabrera para un eventual enfrentamiento con Mariano Rivera el cerrador de NY en la novena entrada y para que mi cuenta saliera perfecta, solo tenía que embasarse un solo tigre y vendría el momento.

Para los fanáticos y seguidores del beisbol no es ningún un secreto que el bateador más temible en la actualidad es el "papa Cabrera" y ese enfrentamiento versus el panameño Rivera el que ha sido por lejos el mejor relevista de la historia del beisbol en el ocaso de su brillante carrera dejaba un escenario ideal en el Yankee Stadium para no moverse del asiento y ver esta lucha de titanes. Miguel ha tenido luego del juego de estrellas una segunda mitad de temporada aquejada por una lesión en la cadera, al punto que el manager de los Tigres Jim Leyland lo ha dejado en el banco responsablemente, sin embargo el corajudo venezolano se ha negado ingresar a la lista de lesionados, por lo que el riesgo de tenerle en play pudiera pasarle factura si la lesión se agrava por el juego diario en la lucha en los dos últimos meses de temporada regular para un cupo en post-temporada.

Así pues, sentado en mi palco en mi casa veo que la escena estaba servida, ultimo inning, "Mo" sale a lanzar, Austin Jackson se embasa por doblete y con dos outs viene el turno de la noche, el que paga la entrada, Cabrera caminando visiblemente adolorido por la lesión y Mariano le obliga a defenderse con un swing que hace resentir la mencionada afección, encendiendo las alertas en Michigan, Miguel luego de la asistencia del trainer indica que puede seguir y el siguiente lanzamiento hace swing y la pelota golpea con infortunio su pierna izquierda, más dolor en la humanidad del de Maracay y en el siguiente envio  de Rivera  bum...cuadrangular de más de 430 pies por todo el jardín central, juego nuevo (3-3)... que maravilloso momento!!! realmente para gritar de emoción el cual cortado porque tenia visitas en mi casa...sin embargo segundos mas adelante reflexionaba en que especial es este deporte, todavía hay espectáculo.

Esta actitud de Miguel y el momento de gloria me hizo recordar un par de figuras en la historia del beisbol, una de ellas es Roberto Clemente Walker (el cometa de Carolina) quien sufrió de múltiples golpes por su estilo de juego agresivo y entregado a su equipo sin importar nunca el marcador, lo que lo hicieron ver como un pelotero "quejoso" cuando le preguntaban los periodistas como se sentía y este respondía; me duele el brazo, la espalda, el tobillo, el dolor del momento...el simplemente era sincero!...y el otro Kirk Gibson, quien en la serie mundial de 1988 jugando con los Dodgers de los Angeles se encontraba lesionado y no pudo abrir en line-up inicial por una lesión en la pierna derecha y vino a batear en la novena entrada contra el que en ese entonces era el mejor relevista del beisbol Dennis Eckersley logrando batear un cuadrangular de dos carreras para voltear el marcador y ganar el partido, en el que sería su único turno en esa serie mundial que finalmente ganaran Los Angeles a Oakland.

Es difícil en estos tiempos conseguir peloteros con la integridad suficiente de poner su corazón, su entrega, su sacrificio por encima de un contrato multianual, sin embargo Miguel Cabrera nos ha devuelto algo de ese pundonor que se ha perdido con los años, por ello muchas gracias Miguelito.

El dia de Alex Rodriguez

Llego el día en que la justicia en el Béisbol  alcanzo a uno de los grandes de la Historia.

Si, uno que está dejando unos números espectaculares  a pesar de las lesiones en los últimos anos. Si ese pelotero que irrumpió en el béisbol en Seattle en 1994 con el título de infalible, la apuesta segura a Superestrella. El pelotero que ha pasado a ser el más adinerado a razón de contratos extraordinarios y hoy parecen leoninos…Ese es Alex Rodríguez.

Me pongo a pensar un poco la historia que ha dibujado su actuación dentro del campo, realmente no lo niego, me agradaba ver a ARod vencer a sus rivales día a día con algunas de sus cinco herramientas, todo esto hasta antes de su llegada al Bronx en el 2004. Allí comencé a verle más humano, más frágil (cosa que no me agrado mucho, porque todos tenemos esos estereotipos de invencibles… héroes), sin embargo poco a poco esa grandeza de los Yankees fueron haciendo mella en su juego, sumado a la presión de los fanáticos y el deseo de conseguir un anillo de Serie Mundial. Vimos constantemente como fallaba en post-temporada al punto de llegarlo a catalogarle como un pelotero “clutchless” (me perdonan el calificativo… dícese en el argot beisbolero el  que falla en el momento de la chiquita)

Las razones por las cuales ha mentido constantemente no las sabemos y quizás nunca tendremos esa respuesta, pero lo que si es cierto es que el comisionado  Bud Selig ha tomado finalmente una decisión que realmente que sentara precedentes en los anales del beisbol: la suspensión de Alexander Emmanuel Rodríguez por 211 juegos por la posesión de sustancias prohibidas y su intento de bloquear la investigación. El impacto de la pena va mas allá del dopaje de Alex y compañía (Braun, Montero, Peralta, Cervelli, Cruz, entre otros) sino que a mi juicio se ha hecho tan poco en esta materia que a veces pienso que MLB es una organización asentada en cualquiera de nuestros países latinoamericanos (con el permiso de mi gentilicio).

 Quizás luce algo simplista este análisis por el hecho de existir acuerdos entre la Asociación de Peloteros y MLB que desafortunadamente entorpecen el panorama para tomar decisiones contundentes en políticas de dopaje, pero piensen un poco en el presente y el futuro del deporte… por lo cual nos seguiremos haciendo muchas preguntas… algo tan básico que puede ilustrar esta situación seria el hecho explicarle a tu hijo que alguien hizo trampa y lo premian dejándolo jugar?

Por lo pronto Rodríguez apela las suspensión que le permitiría seguir jugando hasta que salga el veredicto del juez que por seguramente permitirá seguir en pie la multa impuesta por MLB, en consecuencia la perdida de más de 35 millones de dólares del contrato de ARod y para nosotros el agridulce sabor de una ligera victoria de la sensatez, ética y moral sobre los intereses de individuos que desean estar por encima del sistema y empanar el deporte más bello del planeta.